El lunes 2 de marzo visitamos a nuestra entrañable Hermana Conchita, en Villaverde bajo. La excusa fue llevarle el resultado de la campaña de recogida de alimentos del mes de febrero. Leche fluida, aceite, pañales, harina, azúcar, cola cao... Que generosas son nuestras familias! Llenamos dos coches grandes con donaciones. Porque además llevamos muchísima ropa de niños, adultos, abrigo, zapatos. Les llenamos los armarios de prendas que ellas clasifican y luego entregan por el precio simbólico de 1€ (un euro) cada cinco piezas. 

 Y esto es lo que estamos acompañando como colegio, no lo perdamos de vista: un equipo de gente contagiado por una religiosa excepcional que ayuda de la mejor y más completa forma. En el taller de las Siervas de Jesús, las personas ven que no todo da igual, que el que llega pronto a trabajar se lleva su barra de pan, que tienen que tener su documentación en regla y cumplir con las normas de convivencia que fijan Conchita y sus colaboradores. A cambio, reciben ayuda material y una formación cívica y espiritual que los hace sentir amados por Dios por sobre todas las cosas. Tenemos que sentirnos orgullosos de ser parte, aunque sea mínima, de este invalorable proyecto.